Cómo sobrevivir siendo Biólog@ en una ciudad, sin sucumbir en la banqueta esperando...

lunes, agosto 25, 2008

Esos que no nos dejan ser

Yo no dejé que Pepe Grillo/Chapulín me sermoneara, así que como ya conté, lo saqué por la ventana.

Tal vez quería advertirme sobre tener encerrada a una oruga por puro capricho mío de verla convertirse en mariposa.

Pero es que uno de mis sueños guajiros es crear un mariposario. Cuando por primera vez vi uno en Cuetzalan, Puebla; me maravillaron las crisálidas (pupas, capullos) que albergaban el desarrollo sigiloso de una mariposa. Jamás imaginé que los capullos de las mariposas monarcas fueran de un verde aqua, ¡parecían joyas! Había otros capullos de otras especies que parecían hojas secas. Eso es querer pasar desapercibido, pensé.


Después de guardar los capullos en un área determinada, las mariposas que van saliendo son liberadas a un jardín en el que hay montones de plantas y frutas de las que se alimentan. Ésta es el área recreativa para los visitantes humanoides también.


El caso es que, debido a que Mafafa (la oruga) ha creado tanta espectativa sobre su destino, pues ahí les va el cuento:


"Había una vez una oruga feliz viviendo debajo de una hoja enoooorme de Mafafa (Xanthosoma sagittifolium) cuando fue capturada por una protobióloga ociosa. La metió en un bote grande con grandes trozos de hoja y la bautizó como Mafafa (bien original). Comía con enjundia y pasión. Hasta que un día modificó su comportamiento súbitamente.
Subió por las paredes del bote y se alejó de su alimento, quedándose quieta. La ingenua protobióloga creyó animada que empezaría a formar su capulo. ¡Qué emoción! A la mañana siguiente, Mafafa seguía en el mismo lugar y no había ningún cambio. Pero una noche, al llegar a casa, la protobióloga miró hacia el bote desde lo lejos (y con miopía). Una mancha blanca estaba en el lugar de la oruga. ¿Será el capullo? Se acercó para observarla con detenimiento... ¿qué es eso? ¿son... es... será que.. ? ¡Rayos y centellas!, no era un capullo. Algo le había pasado a Mafafa, algo crecía sobre ella...."

ADVERTENCIA: la continuación del cuento no es apta para personas susceptibles (en cualquier sentido) a historias de terror o que sean de fácil conmoción ante los bicharachos. No nos hacemos responsables del morbo de cada quién.
Hecho el anuncio, he aquí la historia paralela a Mafafa:

"En esta villa del señor (¿el señor de las moscas?) existen seres gandallitas-oportunistas. Siempre hay algún abusador, el lobo de caperucita roja, la garrapata en el perro, el mosquito del dengue, los tábanos... etc etc. Sin embargo, esos hábitos son parte de su supervivencia; por lo que hay que entender que un buen día, la señora Avispa que iba preñada decidió dejar sus huevecillos hijos en un lugar muy adecuado, calientito y con todas las comodidades. Pero esta señora Avispa no iba sola tampoco, estaba acompañada por el virus OGT que habita en el ADN de la ñora. Así que juntos, decidieron inocular a Mafafa, tan verde y gordita".

¿Se entendió?
Pues sí, una avispa que a su vez convive felizmente con un virus, picoteó a Mafafa antes de que yo la encontrara. Pero la picó para depositarle los huevecillos DENTRO de ella. ¿Qué hace el virus? Pues una chambota: ataca el sistema inmune de la oruga, para que ésta no se defienda de los huevecillos invasores y también altera los niveles de la hormona de crecimiento para que nunca forme el capullo y pase más tiempo como oruga comiendo y comiendo. Así, los huevecillos lograrán desarrollarse sin ningún problema dentro de la oruga, hasta que eclosionen y salgan las larvitas de avispa A TRAVÉS de la piel de la oruga. Pero no se alejan del todo, cada larvita forma un capullo (ellas sí) sobre la oruga, formando un tapete blanco algodonoso y terrorífico.

Por respeto a Mafafa, no tomé ninguna fotografía sobre el estado lamentable en el que la encontré, pero pa seguirle con el morbo, ahí les dejo una parecida del interñe:

¿Y qué fue de Mafafa? Pues llegó una MVZ ociosa y decidió quitarle los capullos de encima para intentar que sobreviviera.

En consecuencia:
ni sermón de Pepe Grillo/Chapulín, ni vuelo de mariposa Mafafa, ni avispas recién nacidas.

Ni modo, así es esto del abarrote y de los que no nos dejan ser.

La 3ra foto es del mariposario de la cooperativa
Tosepan Titataniske en Cuetzalan, Pue.